Las plantas son mucho más que un elemento decorativo.
Nos conectan con la naturaleza y nos aportan múltiples beneficios para nuestra salud física y mental.
Estudios científicos demuestran que la presencia de plantas de interior mejora la calidad de vida de las personas, reduciendo enfermedades comunes y respiratorias gracias a su capacidad de absorción de toxinas. También son muy útiles para reducir los niveles de estrés y fatiga.
Las plantas de interior nos ayudan a concentrarnos y potencia nuestra creatividad.